domingo, 23 de octubre de 2011

Circular: 2

Las luces traseras.
Son varias e indican diferentes cosas, a saber:

Las de posición, ese farolillo rojo de cola que indica donde se encuentra y la anchura.
Tener fundida una, con un vehículo oscuro, de noche en una zona oscura como boca de lobo es mala cosa. Circular con las dos fundidas es para que te digan de todo ( y con razón)

Los indicadores de frenado. Imprescindible para quien viene por detrás conozca nuestra maniobra. no llevarlas encendidas o fundidas y mentar a la madre que lo pario es todo uno.

Los indicadores de dirección o intermitentes, que ya vimos, para indicar cambios de dirección o atención/peligro si son simultáneos.
No sea roñica y úselos, la energía se ha de conservar en otras cosas.
Nota para tontos. Se indica antes de hacer la maniobra, no durante donde ya es obvio e igualmente inútil.

La luz anti niebla. Para eso. Bueno, también sirve para quemar la retina de los de atrás con la excusa de ser mas visibles.
Si llueve cuatro gotas no hace falta, se lo aseguro.

La luz de marcha atrás. Iluminación de ayuda para el conductor e indicador de la maniobra para los demás

Juegos: Siempre se ha jugado a contar coches que pasan por su color, por ejemplo. yo les invito a contar los que llevan indicadores fundidos... es un no parar.

Conductores: La responsabilidad del mantenimiento y de llevar los repuestos empiezan antes de arrancar el vehículo. Usarlos debidamente no es una opción.
Ya lo arreglaré (un día de estos) no es una respuesta válida.

Autoridades: Gastarse el dinero de los contribuyentes en anuncios televisivos y salir a vigilar y ayudar en las carreteras no es lo mismo, ni mucho menos.

La tolerancia en este caso, se paga con vidas.



miércoles, 19 de octubre de 2011

El objetivo de la empresa

Si nos detenemos a mirar a las empresas desde lejos, podemos observar un continuo cambio de pequeñas empresas emergentes que surgen y se esfuman por mil causas.
Otras se mantienen durante un tiempo más o menos largo, pero terminan.
Algunas incluso contra todo pronóstico, suben como la espuma alcanzando cierto límite que al rebasarlo pierden toda esencia y se convierten en una fiera devoradora de personas, recursos con un fin difuso y siempre oscuro.

Una vez me contaron una historia de un banquero que después de mucho tiempo, trabajo y éxitos, ya mayor, decide irse unos días de vacaciones a una paradisíaca isla.
Gozaba de su plenitud, sintiéndose en la cima del mundo como un nuevo Alejandro Magno un Julio Cesar viéndose con un pie en la posteridad.

Mientras se tostaba al sol, libando algún cóctel observaba a un nativo que cogía su barca, y salia a pescar a no mucho de la orilla. No tardaba en pescar una buena pieza. Inmediatamente volvía a la orilla, dejaba su barca y se volvía a su choza donde disfrutaba de su pesca y así cada vez que el hombre tenía hambre.

La mente del banquero se disparó en un torrente de cifras y cábalas hasta que la vez siguiente que vió al lugareño le preguntó porque no pescaba más peces si le era tan fácil
- ¿Para que? respondió 
Le propuso vender el exceso y con el comprar una barca mas grande
- ¿Para que? preguntó
Para pescar más y comprar mas barcas.
Le comentó como podría llegar a un buque piscifactoría y una empresa conservera
- ¿Para que? 
Para que un día seas tan rico como yo y puedas irte a cualquier paraíso que desees

Mientras se alejaba le dijo ya tengo eso.

Una empresa debe tener un objetivo claro y no puede ser crecer todo lo posible convirtiéndose en una máquina de producir penas en lugar de alegrías. Sea  de la medida que sea, debe aportarnos lo suficiente para vivir tanto a los dueños como a los asociados que contrata (empleados) para alcanzar un mismo fin.
Una empresa que gane una parte de sus beneficios injustamente de su propios empleados debe ser socialmente rechazada y judicialmente controlada.

Las empresas modelos cuidan de sus colaboradores que son en si mismos la empresa. El mayor activo de que disponen y que se debe conservar de modo adecuado, compensándose equitativamente que no igualitariamente.

Por supuesto el producto debe ser razonable, con un compromiso absoluto con el medio ambiente y el usuario.

¿Que daría por un mundo así?

Cuide su voto, cuídelo bien.

viernes, 14 de octubre de 2011

Circular: 1

Circular será una serie, no necesariamente consecutiva, donde describiré aberraciones conductuales que voy observando y los comentarios que me sugieren

Para empezar y a modo de muestra, empezaré por los indicadores de dirección

Les llaman intermitentes y son unas luces indicadoras de nuestra próxima maniobra.
Indica la intención del cambio de carril o giro que se pretende para avisar a los demás.

No son una señal luminosa de preferencia, para los catetos: no es un apártate que voy. 

Decir: ¡he, que tenia el intermitente puesto! no te va a dar la razón, hay que esperar a que le cedan el paso.

En los carriles de aceleración, estrechamientos de carril, etc no le asegura la entrada, solo indica su deseo de acceder en espera de espacio suficiente o que tenga la gran suerte de encontrar uno de esos poquísimos conducto@s educados que le cedan el paso.

No son un adorno y su uso debe ser obligatorio (¿donde está las autoridades para hacer respetar el código de circulación?)

Conductores: Si están con el intermitente puesto pueden armarse de paciencia y esperar un hueco seguro para hacer la maniobra. 
Encontrar un alma caritativa será una opción cuando usted sea otra de ellas.

Que bien nos sienta la buena educación de los demás cuando nos ceden el paso.
Devuelva el doble y puede que esto empiece a cambiar.

Autoridades: Las señales de trafico no es un agente. Para que funcionen debería haber una cultura que no proporcionan, una educación que no imparten y una protección contra abusos y desmanes que no se realiza.

La desidia lleva a que se diga "Si todos lo hacen yo también" y "no voy a ser el único tonto que lo haga (bien)"

Para aquellos ignorantes, imbéciles, sociópatas, cuasi asesinos que no lo usan sepan que yo y todo aquel que resulte perjudicado, lo tendrá en su pensamiento posiblemente al resto de su familia viva o muerta también y albergarán un gran deseo hacia usted. Le recomiendo no llegar a conocerlo; recuerde que la curiosidad mató a gato.